Erudeando con Duker

Cuando un disco rígido o similar llega al “final de su vida útil”, sobre todo por que no hay más lugar en el gabinete y necesitamos poner uno más grande, una buena idea antes de almacenarlo es limpiar sus contenidos para evitar que si cae en manos de alguna persona “curiosa” nuestros antiguos datos cambien de dueño.

Cómo se imaginaran hoy por hoy con un simple mkfs no basta (format para los fanáticos del amigo Bill), ya que existen en el mercado infinidad de herramientas que permiten recuperar sin mucho problema los datos que allí teníamos.

Para solucionar este problema exiten programas para “wipear” el disco, y en esta ocasión les cuento que uno muy bueno que encontre se puede descargar desde su página web acá. Como se explica en la página oficial, el DBAN destruye la información de TODOS los discos que la maquina tiene conectados cuando se arranca con él, por lo que debemos asegurarnos de que solo lo estén los discos que queremos limpiar.

Una vez grabada la imagen iso en un pendrive, cd o dvd, simplemente arrancamos con el medio elegido, seleccionamos el método a usar y la minidistro (era obvio que iba a estar basada en linux la herramienta) hace su trabajo.

Como referencia, en un Pentium 2 de 200 con 96 megas de RAM se tardaron 4 horas en limpiar un disco de 40g y uno de 30g con el método “dodshort” que usa las pasadas 1, 2 y 7 del método “dod” que se corresponde con el del Departamento de Defensa de los EEUU 5520-22.M. Éste ofrece una buena relación costo/beneficio, ya que es bastante seguro y no demora mucho. Él mejor método a mi entender es el PRNG que llena 8 veces el disco con datos aleatorios, pero iba a tardar 19 horas en mi configuración y ya se iba demasiado.